Surcos puso en marcha este año un programa de capacitación destinado a ingenieros agrónomos y asesores de todo el país
La principal empresa de agroquímicos argentina, Surcos, puso en marcha este año un programa del que participaron más de 500 ingenieros agrónomos de todo el país, llamado “El protagonista sos vos”. Allí, los capacitó sobre los desafíos que enfrenta la agricultura nacional y sobre la revolución que significa la nanotecnología en los productos de la firma.A pesar de los crecientes desafíos que enfrenta, la agricultura actual tiene a disposición recursos y tecnología para ser cada vez más productiva y sustentable. Pero hará falta cada vez más conocimiento para lograr esos objetivos. Y un protagonista central en la generación, transmisión y puesta en práctica de esos conocimientos en el agro es el ingeniero agrónomo. Por eso, la principal empresa de agroquímicos argentina, Surcos, puso en marcha este año un programa de capacitación destinado a ingenieros agrónomos y asesores de todo el país, que permitió profundizar su capacitación sobre los crecientes desafíos de los sistemas productivo de hoy y sobre la revolución que significa la incorporación de la nanotecnología a los productos que brindan soluciones para la agricultura actual.Del programa, denominado “El protagonistas sos vos”, participaron más de 500 agrónomos, que se capacitaron en varios temas, con expertos de primer nivel, y conocieron de primera mano las características de los productos Elite, de Surcos, elaborados con nanotecnología, lo que les permite reducir a la mitad la dosis de principio activo por hectárea (comparado con los productos tradicionales), pero ganando en eficiencia y generando un mejor cuidado del medio ambiente.“Creemos que es fundamental resaltar la importancia del ingeniero agrónomo en un momento de la agricultura en el que hace falta más manejo (y por ende más conocimiento) que nunca, sobre todo si comparamos con tiempos bastante recientes en el que casi todo se resolvía aplicando glifosato”, pone en contexto Sebastián Calvo, presidente de la empresa.El programa recorrió 13 localidades en 6 provincias: Buenos Aires, Santa Fe, Córdoba, Chaco, Santiago del Estero y Tucumán. Y el año próximo se ampliará para alcanzar más pueblos y ciudades de la Argentina y del exterior.
“Nos quedó claro que hay mucho interés por capacitarse y entender el verdadero poder que tienen algunas nuevas tecnologías que no todos conocen a fondo. Y todo esto trasciende a las dificultades productivas y económicas que pueda estar atravesando la agricultura y el país”, evalúa Antonio Cavaglia, gerente de Marketing de Surcos.De las capacitaciones participaron muchos referentes independientes de diferentes especialidades, abarcando los más diversos temas de interés de la actualidad, entre ellos, sin dudas, el de la creciente resistencia de malezas a los herbicidas tradicionales. Por ejemplo, estuvieron Eduardo Cortés y Pablo Belluccini (malezólogos de Córdoba), Marcelo de la Vega (malezólogo de Tucumán), Mariano Luna (entomólogo y especialista en calidad de aplicaciones del INTA Pergamino), Juan Cachavigliani y Lucio Costas (del reconocido Deméter LAB, de Córdoba), Diego Oliva (experto en regulación de equipos para aplicaciones, del Ministerio de Agroindustria bonaerense) y muchos más. “Es un iniciativa muy importante para nosotros, que nos parece que marca el camino que debemos seguir todos los que formamos parte de la cadena agrícola. Por eso, también trabajamos en esto junto a los ministerios de varias provincias, a los colegios de ingenieros agrónomos y a entidades como AAPRESID y AACREA”, sumó Calvo. Muchos de los especialistas nombrados más arriba llevan a cabo ensayos junto a Surcos para generar cada vez más información sobre la revolución de la nanotecnología, mucha de la cual es volcada en las jornadas a los ingenieros participantes. “Hacemos más de 300 ensayos por año con ellos”, precisó Cavaglia. Calvo, por su parte, explica que su compañía es especialista en introducir nuevas tecnologías. “Antes eran tecnologías de otras empresas, sobre las cuales nosotros renovábamos las formulaciones. Hoy, se trata de desarrollos nuestros que constituyen un nuevo paradigma”, manifestó. Más allá de “El protagonista sos vos”, los de Surcos participan también en charlas en eventos de AACREA, AAPRESID y en distintos eventos en el exterior (recientemente estuvieron en la principal exposición agrícola de Bolivia). También se suman a los programas específicos para desarrollar conocimiento sobre la problemática de las malezas que tienen esas dos reconocidas entidades técnicas argentinas. “En todas las instancias queda claro que los ingenieros están ávidos por tener cada vez más información y nosotros desde nuestra parte queremos aportar con información y los mejores productos para resolver los desafíos que hoy tiene nuestra agricultura, como el tema de las malezas”, resumió Cavaglia.En el caso de Surcos, hay un verdadero nuevo paradigma, que debe comprenderse. Los productos elaborados con nanotecnología utilizan la mitad de principio activo por hectárea que las formulaciones tradicionales, y por ende las dosis de uso son mucho más bajas.Por eso, no pueden compararse a las mismas dosis que sus competidores, porque se necesita la mitad para la misma superficie. Ese hecho implica una significativa mejora en el cuidado del medio ambiente, además de ser productos altamente eficaces.Como resume el presidente de la compañía: “Para nosotros es fundamental poder explicar nuestra tecnología, que no puede ser utilizada haciendo una simple regla de tres simple como muchos están acostumbrados”.Y Calvo agrega: “Cada lote es un caso especial, y así queremos que lo vean nuestros protagonistas, los agrónomos. Nosotros también lo evaluamos así y para cada situación específica tenemos una solución concreta”.Surcos siempre tuvo como vendedores a ingenieros agrónomos. La información fue estratégica desde el comienzo en su vínculo con los clientes. Así, la compañía aportó productos y estrategias de manejo que, en realidad, constituían soluciones.Ahora, lo que busca con “El protagonista sos vos” es seguir ese camino y profundizarlo, en línea con los desafíos que imponen estos tiempos para la agricultura argentina.